30 de marzo.- Este jueves se inauguró en Matamoros, Tamaulipas una obra de infraestructura cultural y artística “sin precedentes en ningún lugar del planeta”, según su autor, Arq. Manuel Robledo: “La Calzada de las 7 palabras”.

Se trata de algo que por sus dimensiones se buscaría que estuviese inscrito en el libro de Records Guinness como la escultura virtual más grande del mundo dedicada a quien según las sagradas escrituras de la fe Cristiana es el hijo de Dios, “creador del universo”.
Para Manuel Robledo también es una obra “dedicada a la esperanza” y auspiciada por la familia Ramírez como un regalo a Matamoros en forma de símbolo de vida, esperanza y amor por la comunidad.
De acuerdo a testimonios gráficos es posible apreciar la imagen simbólica del nazareno desde cierta posición y se le llama virtual porque se conforma con la unión de varios elementos colocados en fila.
Es en otras palabras como si se tratara de un rompecabezas visual, hecho que constataron autoridades civiles y eclesiásticas, así como ciudadanos representantes de varios sectores productivos que acudieron a la entrega formal de estas efigies a la sociedad.
Instalada en el parque funeral San Joaquín, en el Km 11.5 de la carretera a la playa, el sitio podría inspirar la visita no solo de feligreses, sino de turistas amantes del arte y la cultura religiosa.
ANTECEDENTES
Casi 24 años después de haber planeado hacer una escultura virtual conmemorativa histórica, la creatividad y visión de Robledo terminó por cristalizar su proyecto con un enfoque espiritual.
Llamada “La Calzada de las Siete Palabras” (alusión al Septem Verba en latíín, alusivas a las siete últimas frases que Jesús pronunció durante su crucifixión, antes de morir, según los evangelios) fue inaugurada en la víspera de la Semana Santa.

Como ya se dijo, se compone por una serie de elementos aparentemente abstractos que, al unirse ante la vista desde cierto ángulo o posicionamiento , crearán la imagen de Jesús de Nazareth.
Según lo recuerda este reportero, en 1999 (cuando estaban por cumplirse 253 años de la fundación del Nuevo Santander, hoy Tamaulipas) , Robledo propuso que en esta ciudad hubiese una efigie que representara a la cultura generacional a partir de la llegada del colonizador español José de Escandón y Helguera .
La idea era instalar ciertas formas de determinada altura , para que al caminar o postrarse ante ellas a cierta distancia o ángulo se viese cómo se compondría la imagen de un conquistador castellano, una indígena y quizá un varón.
Ello simbolizaría la llegada del europeo, el mestizaje y la descendencia. Así lo tiene presente quien esto escribe , aunque escapa de la memoria la razón por la que nunca se llevó a cabo.
Por lo que se ve el proyecto no quedó en el olvido, solo en pausa y este 30 de marzo por fin se reflejará cómo, de manera tridimensional (por la longintud, la altura y la profundidad) se darán la sensación de estar ante la imagen de Cristo.
Esto se podrá encontrar en terrenos del parque funeral San Joaquín, ubicado en el kilómetro 11.5 del ejido Longoreño, en esta ciudad fronteriza.
Mario Ramirez, empresario y promotor de este proyecto, señala que el plan es impulsar al turismo religioso, con todo y que el lugar podrá ser visitado por todo tipo de gente como también puede ser la que gusta de recorrer sitios donde se admira el arte y la cultura, “que sienta la espiritual y la calma de un lugar”.
Agregó que la intención , a la larga, es buscar que este monumento virtual ingrese al Libro de Records Guinness.
(Imágenes compartidas en redes sociales).